El Tribunal Oral Federal de Paraná condenó a Rafael Esteban Vega por transportar casi 3.400 kg de marihuana en un camión de su propiedad. El hombre de 42 años, recibió una pena de 8 años y 2 meses de prisión, más una multa de 15.000 pesos y el decomiso del camión que utilizó para el traslado de la droga.
El fiscal General José Ignacio Candioti, en su alegato, había pedido que el ciudadano oriundo de San José de Feliciano (Entre Ríos) con domicilio en Paso de los Libres (Corrientes), reciba un castigo de 8 años y 6 meses de cárcel más la multa de 15.000 pesos. En tanto el abogado defensor Daniel Cedro, reclamó la absolución de Vega por considerar nulo el procedimiento de Gendarmería que inició la causa y atacar la investigación previa a la interceptación del transporte en plena Ruta Nacional 18.
Este jueves se condenó al ciudadano acusado de transportar el cargamento más grande de marihuana que se haya juzgado en la historia de Entre Ríos. El Tribunal Oral Federal de Paraná, compuesto por Roberto López Arango, Noemí Berros y Lilia Carnero, consideró que Rafael Esteban Vega es autor responsable del delito de traslado de estupefacientes con fines de comercialización, previsto y reprimido por la ley 23.737.
El hombre de 42 años ya lleva casi dos años en prisión. Está alojado en la UP N° 3 de Concordia, a donde llegó luego de que fuera interceptado por personal de Gendarmería en la Ruta Nacional 18, en inmediaciones de Concordia, cuando fue sorprendido trasladando más de tres toneladas de droga.
Diez millones de dosis y treinta y cinco millones de pesos
En su alegato, el fiscal Candioti repasó la sucesión de acontecimientos desde que personal de Gendarmería recibió una información proveniente de Corrientes, sobre un camión cargado con marihuana que se dirigía a Buenos Aires o Paraná. “La Gendarmería puso en conocimiento a la Justicia Federal de esa información y encontró una acogida que se plasmó en estado de sospecha. El dato fue obtenido de fuentes anónimas. El juez decidió tareas de seguimiento y corroboraron los datos con los que contaban: se trataba de un camión color rojo, en el que iba Vega”, refirió Candioti. Los gendarmes “vieron al camión en una estación de servicio de Curuzú Cuatiá en el seguimiento que le hicieron. Eso coincidió con lo que el imputado dijo acá, cuando contó que paró en una estación de servicio”, alegó.
El fiscal recordó que el camión fue requisado recién cuando hubo una orden judicial. “El magistrado otorgó el permiso cuando el camión fue interceptado, después de la media noche del 17 de diciembre. Antes Vega había eludido el primer puesto de Gendarmería sobre la Ruta Nacional 14, pero luego fue interceptado. Se le labró un acta por infracción y, mientras tanto, venía la orden de requisa. Se le leyó la orden, se pasó el can que marcó a la mitad del semirremolque, donde estaban los paquetes de marihuana”, narró Candioti.
El representante del Ministerio Público recordó también que luego “fueron hasta el Escuadrón de Concordia, donde comenzó el descenso de la droga”. “Eran 130 paquetes con varios ladrillos adentro. El peso total fue de 3.394 kilos de marihuana. Hay que remarcar la magnitud del secuestro y del injusto. Después fue la detención de Vega y, posteriormente, se hizo la pericia en base a las muestras elegidas al azar por testigos civiles”, agregó.
El fiscal destacó “la corrección del procedimiento” y se refirió a las fuentes humanas de los gendarmes que informaron el dato. En ese sentido, entendió que “existió un anoticiamiento que está perfectamente receptado por la doctrina y jurisprudencia”. “Esto es válido para iniciar acciones judiciales y así la gendarmería lo puso en conocimiento de la Justicia Federal”. “Es un procedimiento incuestionable a la luz de este Ministerio Público Fiscal”, resaltó. Sobre Vega, dijo que “no sufría padecimientos económicos”. “Era propietario del camión que usó para transportar la droga”, asentó.
Candioti repasó los testimonios brindados en el debate oral. Recalcó que el remito que llevaba Vega estaba incompleto y le faltaba firma e importes. Recordó que un gendarme reconoció que si el imputado bajaba de Corrientes con destino a Paraná, “debería haber bajado por la ruta 6 y no por la 14”. “Más de un testimonio coincide en que la droga era fácilmente identificable en la carga, ¿cómo el imputado no advirtió el cargamento? si en Formosa reconoció que ató él la lona”, preguntó.
Señaló entonces que “la autoría del imputado está absolutamente acreditada”. “No quedan dudas que Vega ostentaba la carga de droga en un camión del que él era propietario. Que el cargamento y el medio empleado para el traslado (camión), se encontraban en su estricta esfera de custodia”, acusó.
“El imputado dice que a la droga se le cargaron mientras dormía. Pero no pudo explicar qué pasaba si se despertaba y sorprendía a las personas cargando semejante cantidad. Además, él pagó y no supo a ciencia cierta cómo iba a cobrar. No pudo explicar lo de papelera Itapé, que incluso en el oficio, la papelera dice que no tenían conocimiento que venía el cargamento. Tampoco contactaron a Pelayo”, evaluó. “No puede dudarse del dolo, la intención de la acción. Vega intentó eludir el control de Gendarmería porque no quería ser descubierto, porque sabía que llevaba el cargamento. No existe ninguna causal de justificación. Vega comprende la gravedad de sus actos y por eso debe ser responsabilizado”, reclamó.
Por último, subrayó que “la magnitud del injusto es muy importante”. “A mayor cantidad de droga, mayor peligro para la salud pública. De la droga que llevaba Vega, se podían obtener más de 10 millones de dosis umbrales. No nos podemos abstraer de este daño. Sobre el valor del cargamento, esto del narcotráfico, a mayor distancia recorrida, más se paga en plaza. Él llevaba 35 millones de pesos. No se le confían 35 millones de pesos a una simple mula. Él no era el eslabón más débil de la cadena de narcotráfico. No era una persona sin trabajo, padecimiento económico y de socialización”, juzgó.
Fuente: Análisis Digital - Chajarí al Día