Las pruebas se realizan en el Hospital Militar de Buenos Aires, y constan de dos aplicaciones en un lapso de tres semanas.
Se trata de Lorena Demicheliz, una de las personas que inició este proceso con la ilusión de que se encuentre pronto la vacuna que nos permita retomar nuestra vida normal.
Unas 25 mil personas se anotaron como voluntarios para probar la vacuna contra el coronavirus que el laboratorio Pfizer elaboró en conjunto con BioNTech, pero solo unas 4.500 fueron seleccionadas, entre ellas una federalense.
Las pruebas se realizan en el Hospital Militar de Buenos Aires, y constan de dos aplicaciones en un lapso de tres semanas, pero con seguimiento y control durante dos años.
En el Gobierno creen que la vacuna contra el coronavirus que está desarrollando la farmacéutica norteamericana Pfizer podría estar a fin de año y aplicarse en los trabajadores esenciales.]
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Es la más avanzada, de acuerdo a la información internacional.
Se trata de una de las tantas vacunas que están en proceso de verificación. En este caso, Argentina fue elegida para “ser parte de la Etapa 3 de un ensayo clínico cuyo objetivo principal es probar la eficacia de una vacuna” para prevenir el COVID-19.
«La mitad de los participantes en el estudio recibirá la vacuna en desarrollo y la mitad recibirá placebo –en forma de inyección de solución fisiológica- y de esta manera podremos evaluar comparando los resultados en los dos grupos si la vacuna es eficaz para prevenir COVID-19», describe la página oficial del laboratorio.
Se trata de la Fase 3 de prueba de la vacuna encabezado por la empresa BioNTech en colaboración con Pfizer, avalado por el Estado nacional a través de la Administración Nacional de Medicamentos y Tecnología Médica (ANMAT).
