La región se encuentra bajo alerta naranja debido a la posibilidad de tormentas fuertes a localmente severas. Estas tormentas podrían estar acompañadas por caída de agua en cortos períodos, actividad eléctrica frecuente, caída de granizo de diversos tamaños y ráfagas muy intensas que pueden superar los 90 km/h.
Se prevén valores de precipitación acumulada entre 80 y 100 mm, aunque es posible que se superen estos valores en forma puntual. La comunidad debe tomar precauciones para protegerse de las condiciones climáticas adversas.
Se recomienda a la población mantenerse informada sobre las condiciones climáticas actuales y las previsiones, y tomar medidas de precaución para evitar daños y accidentes.