Miguel Angel Hollmann murió a los 71 años. El directivo estaba internado con coronavirus desde enero y, a pesar de lucharla, no resistió ante enfermedades preexistentes.
El Club Atlético Patronato de la Juventud Católica lamenta informar el fallecimiento del presidente Miguel Angel Hollmann.
A la edad de 71 años dejó de existir el presidente de nuestra entidad Miguel Angel Hollmann. Desde el mes de enero venía batallando ante el Covid 19. Finalmente su cuerpo no resistió ante enfermedades preexistentes. Familiares, amigos, socios e hinchas de Patronato se mantuvieron en vigilia, rezaron por él y llevaron adelante cadenas de oración. Desde el 25 de enero estaba internado en el Sanatorio la Entrerriana de Paraná.
? Con profundo pesar, el Club Atlético Patronato informa el fallecimiento del presidente Miguel Ángel Hollmannhttps://t.co/66YjuPsdiw pic.twitter.com/XIeJ8OIe8R
— Club A. Patronato (@ClubPatronatoOf) March 23, 2021
Tito, tal cual su apodo, fue jugador, hincha y dirigente de la institución que lo abrazó prácticamente en toda su vida. Su rol como miembro de la comisión directiva fue clave para gestar los años de gloria del club, hasta el ascenso a Primera División. Su primera presidencia se inició en 2005 hasta 2009, luego volvió al máximo cargo en 2016 hasta sus últimos días, más allá de una licencia de 60 días, por padecer de coronavirus.
Fue el alma mater del crecimiento de la entidad en los últimos 15 años, consiguiendo el respeto de sus pares dirigentes.
SEMBLANZA
Su llegada a la presidencia fue el puntapié inicial. Hombre del tablón, apasionado hincha, marcó el rumbo del fútbol de Patronato.
Antes de su paso a la dirigencia fue parte de la hinchada de Patronato que acompañaba al equipo en los torneos de la Liga Paranaense de Fútbol como así también los viejos Regionales y el Nacional de 1978.
Fue presidente cuando el equipo ascendió al Torneo Argentino A (2008) y vicepresidente en los posteriores ascensos (2010 –B Nacional-, 2015 –Primera A-). “En estos últimos años se dieron las buenas para Patronato”, repetiría tras los éxitos y ya cuando el club se abrazó a Primera División. Agradecido por el apoyo de los hinchas cada vez que podía manifestaba que “la gente nos acompañó mucho y su aliento nos dio fuerza para seguir”.
Y así fue Tito. Hasta su último aliento acompañó al club, lo caracterizaba su humildad y la pasión por estos colores, su vida era Patronato.
Hoy el club lo llora y despide.
¡Hasta siempre, Tito!
