Lo último que se supo de la joven de 33 años fue que iba a bordo un remis en la madrugada del sábado. La policía realiza una exhaustiva búsqueda en toda la provincia. El remisero, que tiene antecedentes por violación, fue detenido.

La Policía del Chaco busca intensamente a Tatiana Kolodziez con un mega operativo de rastrillaje en la localidad de Fontana, en cercanías del puente Bergagno. Mientras, el único detenido continúa en vigilancia por personal policial.

Si bien los investigadores siguen la pista de un posible secuestro, ya que hubo una comunicación extorsiva al novio de la persona buscada, no descartan un presunto ataque sexual.

Los hechos

Todo comenzó la madrugada del sábado, cerca de las 2, cuando Tatiana Nadia Kolodziez (33), abordó un remís en la localidad de Fontana, ubicada a 5 kilómetros de Resistencia, en el sudeste provincial.

Desde ese momento y hasta esta tarde, nadie volvió saber del paradero de la mujer, informó el sitioDiario Norte de Chaco.

Tras la denuncia por desaparición, los investigadores detuvieron al chofer del remís, de 52 años, que en septiembre había logrado la libertad condicional tras cumplir una condena de 16 años de prisión por cuatro violaciones cometidas en 1995 y 1996 en la Capital Federal.

El secretario de Seguridad chaqueño, Javier Oteo, explicó que el ahora detenido tenía prohibido trabajar de remisero porque en ese contexto había cometido los abusos por los que lo condenaron.

Sin embargo, este hombre conducía desde la semana pasada un auto de una agencia de remises en la ciudad chaqueña de Resistencia, agregó el funcionario.

Según las fuentes, el sospechoso no declaró ante los investigadores que, a su vez, no encontraron en su auto ninguna pertenencia de la mujer desaparecida.

Por su parte, el novio de Tatiana denunció que cuando él quiso comunicarse con la mujer apenas ésta desapareció, la llamó varias veces al teléfono celular y en una oportunidad fue atendido por un extraño que le dijo "vayan juntando la plata".

En la pesquisa interviene el personal de Investigaciones Complejas de la Policía del Chaco a la que, según aseguró el ministro de Gobierno de la provincia, Juan Manuel Pedrini, se le sumaron efectivos de Gendarmería Nacional.

Así se lo expresó el funcionario al recibir en el mediodía de este lunes a los familiares de la mujer desaparecida.

En tanto, a través de la red social Facebook, los familiares y amigos de Tatiana publicaron una fotografía de la mujer y pidieron colaboración a la ciudadanía para que los ayuden a encontrarla.

En ese sentido, la imagen de Tatiana ya había sido replicada por esa red social por más de 7.000 personas.

El remisero, con antecedentes por violación

En el año 1997 la Justicia condenó a 16 años de prisión a un taxista que violó a tres mujeres jóvenes en marzo de 1996.

Además, para condenarlo el Tribunal Oral Nº6 de la Capital Federal también incluyó los delitos de privación ilegítima de la libertad y robo.

“El acusado próximamente podrían sumarse algunos años más de cárcel a su condena. Es que aún tiene pendiente en la Justicia de Instrucción una causa similar. Según informó la fiscal Diana Godal, en poco tiempo ese caso será elevado a juicio oral. Pero además existen firmes sospechas de que podría haber más víctimas que no se animaron a denunciarlo por otras violaciones. El jueves 9 de octubre los jueces Guillermo Jorge Yacobucci, Leonardo José De Martini y Carlos Alberto Mahiques -integrantes del Tribunal Oral Nº6- darán a conocer en una audiencia pública los fundamentos de la condena”, fue publicado ese momento.

Textual:

La fiscal había pedido una condena a 18 años de cárcel, pero los jueces decidieron que fuera a 16 años. Se estableció que el acusado no solo abusaba de sus víctimas, cuyos nombres no fueron revelados por el Tribunal. Después de violarlas, a dos de ellas las llamó por teléfono. Y a otra la fue a esperar a la puerta de su casa. El hombre conseguía sus teléfonos y direcciones porque les robaba sus carteras y billeteras, entre otros objetos personales. La Policía logró detenerlo gracias a las denuncias de las víctimas.

Ellas aceptaron someterse a los exámenes y estudios ginecológicos necesarios para reunir pruebas para la acusación. Las víctimas tenían 19, 26 y 27 años cuando fueron violadas y una de ellas era virgen. En este sentido, la fiscal Godal destacó el valor de las jóvenes, quienes, durante las audiencias, contaron a los jueces lo que les había pasado. Su atacante, estaba sentado a pocos metros de ellas.

Se estableció que el acusado siempre actuaba de la misma manera. Primero amenazaba a sus víctimas con un arma para robarles sus pertenencias. Luego se comprobó que el arma no era real sino una réplica de un revólver 38. Una vez reunido el botín, las violaba en el asiento trasero del taxi. Según el relato de las víctimas, las obligó a mantener relaciones sexuales vaginales y anales, además de obligarlas a practicar sexo oral. Dos de las violaciones ocurrieron en un taxi Renault 9.

La otra en un Peugeot 504. Los autos no eran suyos, ya que el acusado era un peón de taxi que alquilaba su vehículo. Siempre buscaba a sus víctimas por las calles de los barrios de Palermo y Belgrano, a la madrugada. Además de las denuncias, hubo un dato clave que condujo a su detención, ocurrida en abril de 1996.

La madre de una de las chicas violadas logró anotar los tres últimos números de la patente del taxi Renault 9. Con ese dato se cerró el cerco sobre el violador, que fue detenido en un control policial nocturno. Los expertos policiales pudieron elaborar un identikit del agresor gracias a la descripción brindada por las jóvenes.

Como se pudieron obtener muestras de semen en el asiento trasero del auto, la Justicia ordenó la realización de exámenes genéticos de ADN, que resultaron positivas. Además de estos elementos de prueba, la Fiscalía contaba con los resultados de los reconocimientos hechos por las víctimas durante la rueda de presos.

Aunque el violador se había afeitado la barba que llevaba durante la época de las violaciones, sus víctimas lo reconocieron. Al momento de detenerlo, la Policía encontró que el atacante tenía objetos que pertenecían a sus víctimas. Entre ellos había un walkman, un aparato de radio llamado y varias carteras.

Las violaciones ocurrieron en serie. La primera fue el 3 de marzo de 1996 y la víctima tenía 26 años: el taxista le robó además 165 pesos. La segunda violación ocurrió el 28 de marzo y la joven tenía 19 años, sufrió una experiencia terrible porque además era virgen y el atacante le robó 170 pesos y un walkman. El tercer hecho ocurrió el 29 de marzo y la víctima tenía 27 años.