El Sindicato Unidos Portuarios Argentinos rechazó "los actos de violencia impulsados por patotas porteñas de la CTA de Pablo Micheli, lideradas por Carlos Chile y el referente de los jubilados portuarios Francisco Montiel, quienes procuraron entorpecer el acto eleccionario para renovar las autoridades del gremio".
Un comunicado de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) desmintió por su parte que en "los lamentables incidentes producidos en el puerto de Buenos Aires, en el que participaron trabajadores del SUPA, se haya involucrado personal" de esa oganización nacional, señaló el dirigente Luis Rebollo.
"Ningún trabajador de la FEMPINRA participó en esos lamentables incidentes. El gremio, como es su costumbre, repudia todos los hechos de violencia originados en cualquier escenario social y, en este caso, con agresiones físicas entre trabajadores portuarios", señaló Rebollo, secretario de Prensa nacional de la organización.
Un comunicado del SUPA expresó también que la CTA y el grupo de Montiel procuraron entorpecer "el acto electoral que se realiza para renovar autoridades y atacaron con armas de fuego y cuchilladas a trabajadores estibadores, quienes debieron ser hospitalizados".
"Quieren presentarse como víctimas en los medios, a pesar de haber dejado más de 15 heridos -uno de bala-. Es un absurdo total. Incluso agredieron a periodistas de canales de televisión. El SUPA repudia la violencia. Enviaron barrabravas para entorpecer un acto eleccionario que debió ser libre en este país democrático", señaló Juan Corvalán, secretario general de la organización sindical.
El dirigente expresó que desde esta madrugada "esos grupos violentos se apostaron en las intersecciones de Ramón Castillo y Prefectura Naval, quemaron gomas e ingresaron al predio donde se realizaban las elecciones para impedir que los estibadores de las terminales porteñas pudiesen votar", y explicó que esos sectores luego "se retiraron ante los reclamos de los trabajadores y la llegada de la Policía Federal y la Prefectura Naval, que finalmente los desalojó".
Corvalán confirmó esta tarde que como consecuencia de la presencia policial el acto eleccionario se realiza de manera normal y que ya sufragaron más de 300 trabajadores, y añadió que el gremio realizará una denuncia penal contra los dirigentes de la CTA Micheli.
"No hay dos grupos en disputa, ya que no hay trabajadores de la CTA. El incidente tuvo el objetivo político de impedir que el gremio tenga continuidad institucional. Las elecciones estaban habilitadas por el Ministerio de Trabajo y no se presentó ninguna lista opositora", sostuvo Corvalán, quien se presentó para el período 2013-2017.
Aseguró que "esos grupos tienen objetivos políticos y no laborales" y explicó que el sector "es estratégico para el comercio exterior".
La CTA había señalado esta mañana que la situación de violencia se produjo exactamente al revés, responsabilizando por los hechos a "barrabravas de Independiente y dirigentes del SUPA".
Chile, secretario general de la CTA Capital, había asegurado que "los heridos" en el puerto pertenecen a la Federación Martítimo-Portuaria, lo que fue desmentido por el SUPA y la propia Fempinra.
Los heridos fueron trasladados al Hospital Fernández, aseveraron a Télam fuentes policiales y sindicales.
"Ningún trabajador de la FEMPINRA participó en esos lamentables incidentes. El gremio, como es su costumbre, repudia todos los hechos de violencia originados en cualquier escenario social y, en este caso, con agresiones físicas entre trabajadores portuarios", señaló Rebollo, secretario de Prensa nacional de la organización.
Un comunicado del SUPA expresó también que la CTA y el grupo de Montiel procuraron entorpecer "el acto electoral que se realiza para renovar autoridades y atacaron con armas de fuego y cuchilladas a trabajadores estibadores, quienes debieron ser hospitalizados".
"Quieren presentarse como víctimas en los medios, a pesar de haber dejado más de 15 heridos -uno de bala-. Es un absurdo total. Incluso agredieron a periodistas de canales de televisión. El SUPA repudia la violencia. Enviaron barrabravas para entorpecer un acto eleccionario que debió ser libre en este país democrático", señaló Juan Corvalán, secretario general de la organización sindical.
El dirigente expresó que desde esta madrugada "esos grupos violentos se apostaron en las intersecciones de Ramón Castillo y Prefectura Naval, quemaron gomas e ingresaron al predio donde se realizaban las elecciones para impedir que los estibadores de las terminales porteñas pudiesen votar", y explicó que esos sectores luego "se retiraron ante los reclamos de los trabajadores y la llegada de la Policía Federal y la Prefectura Naval, que finalmente los desalojó".
Corvalán confirmó esta tarde que como consecuencia de la presencia policial el acto eleccionario se realiza de manera normal y que ya sufragaron más de 300 trabajadores, y añadió que el gremio realizará una denuncia penal contra los dirigentes de la CTA Micheli.
"No hay dos grupos en disputa, ya que no hay trabajadores de la CTA. El incidente tuvo el objetivo político de impedir que el gremio tenga continuidad institucional. Las elecciones estaban habilitadas por el Ministerio de Trabajo y no se presentó ninguna lista opositora", sostuvo Corvalán, quien se presentó para el período 2013-2017.
Aseguró que "esos grupos tienen objetivos políticos y no laborales" y explicó que el sector "es estratégico para el comercio exterior".
La CTA había señalado esta mañana que la situación de violencia se produjo exactamente al revés, responsabilizando por los hechos a "barrabravas de Independiente y dirigentes del SUPA".
Chile, secretario general de la CTA Capital, había asegurado que "los heridos" en el puerto pertenecen a la Federación Martítimo-Portuaria, lo que fue desmentido por el SUPA y la propia Fempinra.
Los heridos fueron trasladados al Hospital Fernández, aseveraron a Télam fuentes policiales y sindicales.
