Con el empate, Independiente, que venía de ganarle a Crucero del Norte de Posadas (2-1), sumó 18 puntos, quedó a 14 del líder Banfield y a cinco del tercer puesto, último que otorga un pasaje a Primera División, que hoy lo detenta su rival.

Del otro lado, Unión, que acumuló cinco encuentros sin derrotas con tres triunfos y dos empates, alcanzó las 23 unidades y quedó por primera vez en el campeonato en puesto de ascenso.

El partido fue entretenido, con mucho ritmo, cambiante y con muchas situaciones de peligro. Independiente comenzó mejor, con mayor predominio en el manejo de la pelota y del terreno.

Sin embargo, la primera chance fue para la visita, después de una contra en la que Emanuel Moreno se jugó la personal ante la marca de Cristian Tula, definió de zurda, rasante, y el arquero Diego Rodríguez salvó muy bien y envió la pelota al córner.

En la siguiente, Montenegro habilitó a Cristian Menéndez que definió con cierta displicencia ante la salida de Daniel Islas y el arquero se quedó con el duelo.

Pero el rubio delantero se redimió unos minutos más tarde, cuando peleó una pelota dividida en el área y el arquero visitante le cometió penal, cuando se escapaba para definir y provocó la apertura del marcador.

En la segunda parte, Unión salió decidido a buscar el empate y en la primera que tuvo, el apuntado Moreno estrelló un derechazo en el travesaño.

En una acción inmediata, Unión igualó. Hubo una corrida espectacular de Sebastián Palacios por derecha, que dejó tres defensores en el camino, envió el centro y Alemán, de cabeza, anotó.

Después del empate, Independiente sintió el golpe: Matías Pisano y Montenegro desaparecieron y el equipo careció de fútbol para buscar el triunfo. En los últimos minutos buscó con más empuje que imaginación, pero ya era tarde.

El dato de color, negro para Independiente, radica en que el último enfrentamiento ante Unión, el 12 de abril pasado, en Avellaneda, finalizó 1-1.

En aquella noche el gol visitante también lo anotó Alemán y ese resultado provocó la ida del DT Américo Gallego, en el descalabro deportivo que luego finalizó con el descenso.

Los jugadores de Independiente abandonaron el campo de juego entre silbidos de su hinchada y con la preocupación de tener que  mejorar considerablemente su producción si pretende pelear el ascenso.

Mientras que Unión demostró credenciales de candidato para volver rápidamente a la máxima categoría.