Con menos energía de la acostumbrada debido a la lesión en su rodilla izquierda que lo persigue desde la tercera ronda de Wimbledon, Juan Martín Del Potro buscará dejar una huella más en Londres y conseguir boleto de lujo para su primera final. El certamen inglés se desarrolla sobre una superficie de césped y reparte una cifra millonaria: 26,5 millones de euros.
La Torre de Tandil, octavo del ranking de la ATP, medirá fuerzas desde las 9 frente al serbio Novak Djokovic, número uno del planeta. El match se llevará a cabo en el court central del complejo tenístico de All England y contará con la televisación de ESPN.
"Debo dar el 100 ó el 110 por ciento para ganarle, él es el número uno, es un campeón acá", aseguró el argentino en el día anterior a la competencia.
Efectivamente Djokovic fue campeón en 2011, aunque la última experiencia de instancias finales en ese estadio, sobre el mismo césped, favorece al argentino, quien le arrebató al serbio la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres, el año pasado.
El tandilense "es un gran rival, no hay un real favorito en esta etapa del torneo", evaluó Djokovic, quien, dijo que hará "lo mejor" para llegar a la final. No obstante, los antecedentes previos demuestran que el europeo es cómodo dominador en los enfrentamientos entre sí, pues suma ocho victorias contra tres del tandilense.
Hasta ahora solo el cordobés David Nalbandian llegó a una final de varones en Wimbledon en 2002, cuando cayó ante el australiano Lleyton Hewitt.
Del Potro viene jugando su mejor tenis en este Wimbledon, y pareció ir de menor a mayor, a decir por el gran partido en el que arrasó en sets corridos frente al español David Ferrer, que desde el lunes será tres del mundo. El partido del miércoles había tenido su cuota de angustia por la caída del argentino en el game inicial, que lastimó, aún más, a su maltrecha rodilla izquierda, afectada por una entorsis.
La decisión parece ser no pensar en esa lesión, a decir de Del Potro tras el entrenamiento de 40 minutos en el Aorangi Park, donde también trabajaron los otros tres semifinalistas.
"Estoy bien, creo que voy a estar mejor el viernes. Tengo que pensar en el partido con Nole", dijo, aunque auguró que será "complicado".
Ambos llegan a esta instancia decisiva con resultados soñados, ya que no cedieron un solo set en lo que va de la competencia. Solo que Nole lo hizo casi sin despeinarse. Mientras que la Torre de Tandil lucha, además de con sus oponentes, con el dolor en su rodilla. Desde la eliminación temprana del español Rafael Nadal (5) y el suizo Roger Federer (3), el serbio es el claro favorito. Pero ahí está Delpo, del otro lado de la red, dispuesto a hacer realidad su sueño y volver a llevarse los laureles.
Una vez que Djokovic y Del Potro, que al menos subirá un puesto en el ranking, definan al primer finalista, saldrán a la cancha principal el escocés Andy Murray, dos del mundo, y el polaco Jerzy Janowicz, 22 del escalafón.
Murray ganó el año pasado el oro olímpico en este escenario, y ahora va por terminar la abstinencia británica de festejos en Wimbledon y cortar los 77 años que no gana un súbdito de la corona, desde que el legendario Fred Perry alzó la copa en 1936. Este es el torneo más antiguo y prestigioso del circuito de tenis, ya que se disputa desde 1877, tendrá en su actual edición la masa de premios más alta de su historia con un aumento del 40 por ciento.